¿Preocupado?

¿Qué te preocupa, tu futuro?

Pues siento decirte que no hay nada de qué preocuparte. Absolutamente de nada, y mucho menos concerniente a tu Futuro. Puedes elegir vivir preocupado por tu futuro, aún sabiendo, que por mucho que lo hagas, no lograrás cambiar nada de ese futuro.

La preocupación es un sentimiento inútil, no sólo porque te hace perder el tiempo y mucha energía. Si no porque te hace escapar del momento presente. Aunque no lo creas, cuando te preocupas, no estás aquí, si no allí. No tú, si no tu mente. Tu cuerpo sigue aquí, esperando a que regreses, padeciendo tu angustia. Inmovilizas tu presente, por algo que acontecerá en tu futuro, o no. Debes admitir que no tienes el control de nada, que no provenga de ti. Y lo que proviene de ti, está siempre en el presente, no en tus preocupaciones del futuro.

¿Regresas ya a casa?

La preocupación está bastante arraigada en nuestra cultura y educación. Te han enseñado a asociar la preocupación con el Amor:

«Cuándo amo a alguien, me preocupo por él»(creencia cultural)

¿Te preocupas o lo amas?

¿Y no es menospreciar sus capacidades, preocuparte por él?

¿Él o ella no puede valérselas por si mism@?

¿Crees que le aportas algo positivo con tu preocupación?

Cómo antes comenté, la preocupación inmoviliza. Te deja en bloqueo, porque en vez de trascenderla, te recreas en ella. Te han educado a ser cauteloso y prudente ante lo desconocido. Se les olvidó alimentar tu curiosidad innata. Base de cualquier aprendizaje. Te hicieron creer que lo desconocido, estaba relacionado con el peligro. Y se les pasó también recordarte, que detrás de lo desconocido está el misterio y la sorpresa.

Si crees en ti totalmente, desaparecen tus límites. Piensa en todas esas personas importantes para ti y a las que admiras.

¿Crees que le temen a lo desconocido o por el contrario son amantes del misterio y de la sorpresa?

No permitas que algo inútil, se adueñe de ti. Quizás no tengas un plan concreto de cómo enfrentarte a lo desconocido. Y es que hay veces que los planes no te hacen falta. Te los encuentras mientras avanzas, desde el presente. Ocupándote de ti.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Ir arriba