Mientras el sufrimiento sea tolerable, la mejora de la situación se demorará en el tiempo. Dicho de otra forma, hasta que no puedas soportarlo más, no cambiarás las cosas. Y es que si das tu consentimiento, para que te duela, te seguirá doliendo.
Tu aguante siempre es proporcional al sufrimiento que seas capaz de soportar. La tolerancia al dolor, tú la determinas. Ya que eres tú, quién decide cuándo es el momento oportuno, para alejarse de la situación conflictiva. Normalizar una circunstancia problemática o tóxica, es lo que te lleva, a permanecer en ella. Si no te duele demasiado, no eres capaz de encontrar una razón lo suficientemente convincente, como para apartarte del sufrimiento. Aunque, también puede suceder, que encuentres demasiadas excusas para quedarte, y no para abandonar.
¿Es tu incertidumbre, la que provoca tus excusas?
Mientras el sufrimiento sea tolerable, prefieres permanecer en lo conocido, que escapar hacia lo desconocido. Lo desconocido crea incertidumbre, sin embargo lo conocido, la certeza, de que nada podrá cambiar.
«Toda experiencia ha demostrado, que la humanidad está más dispuesta a sufrir, siempre que los males sean tolerables, que a mejorar la situación, aboliendo las formas a las que está acostumbrada»
(Declaración de Independencia del 4 de Julio de 1776)
¿Y si promueves tu propia declaración de independencia, y te desvinculas del dolor?
La zona de confort, a la que te has acostumbrado, como su propio nombre indica, es muy confortable. Aunque desconoces, la comodidad que te pueden aportar, nuevos entornos, prefieres permanecer ahí, ya que no sabes, si lo que te espera, será mejor.
«Más vale malo conocido, que bueno por conocer».
¿De verdad que prefieres lo malo a lo bueno, aunque tengas que hacer el esfuerzo de conocerlo?
¿Prefieres seguir sufriendo, a dejar de sufrir?
No toleres o normalices lo que no te hace bien. No esperes a que la situación cambie por si sola. Cambia tú, la situación. Eso es hacerte responsable. Recuperar las riendas de tu vida, es fundamental, si quieres alejarte del dolor. No permitas que sea otro quién las sujete. El ritmo y el rumbo lo marcas tú. Adaptarse a lo malo, nunca es una buena opción. Porque todo lo nuevo que te espera, es mejor que lo malo.
«Cuando un hombre no sabe hacia dónde navega, ningún viento es favorable.»
(Séneca)
No esperes a que te sople el viento, danza tú con el viento. En realidad, quién hace que un viento sea favorable, eres tú mismo. Porque si es propicio, aprovechas su brisa para avanzar más rápido, y si no lo es, te esperas, hasta que amaine. Nunca te dejes llevar por el viento, si no sabes hacia dónde va ese viento. Y mientras el sufrimiento sea tolerable, te dejarás arrastrar por él. No toleres lo que te hace daño y no sufras porque aún lo soportas. Aguanta sólo, lo que te hace bien.
«Ningún hombre es libre, si no es dueño de si mismo.»
(Epicteto)
Me encanta lo que escribes
??Muchas gracias Jonatan, por tus palabras!. Pues a mi me encanta que compartas tu opinión. Graciaass ???
Extraordinario mensaje!
Sabiduria a la carta…
Me pido cuarto y mitad!
Graciaas miles Bego ???❤️. Tú si q eres sabia!. Gracias por compartir. ??