El para qué de tus cosas.
Imagina que llevas semanas con dolor de espalda. Has ido posponiendo concertar la cita con tu médico, porque intuías que en cualquier momento, podría desaparecer esa molestia. Sin embargo ya no lo soportas más. ¿Vas al medico porque te duele mucho o para que te deje de doler? Aunque a simple vista pueda parecer imperceptible, …